·
Grande entre los humildes, pobre entre los poderosos, el relato del Valencia es un lugar inexacto, una obra por definir. Ese es su encanto y la fuente de todos sus tormentos. Un caldo de cultivo exquisito para recrear situaciones como la presentación de la maqueta del futuro estadio. Un proyecto reducido a su pretenciosa puesta en escena, con políticos prestos a ejecutar planes urbanísticos a partir de los éxitos de un club de fútbol a cuyo gobierno se han aupado empresarios agigantados con la efervescente fiebre del ladrillo y con ansias de saciar la vanidad del reconocimiento social. Esa estampa evoca a "La escopeta nacional". La tétrica soledad de la inacabada mole de cemento del Nuevo Mestalla, que iba a situar al Valencia "en la Champions económica", se parece demasiado al final de 'Bienvenido Mister Marshall". Las películas que nunca dirigió Berlanga las protagonizó su equipo, al que siguió hasta sus últimos días. El Valencia, un Imperio Austrohúngaro en continua transformación, ha encontrado por fin su relato: es un club berlanguiano.Vicent Chilet
Socio del Valencia CF
·
¡Qué bien expresado, Vicente! Un club berlanguiano, sí, al menos en estos tiempos duros que nos está tocando vivir.
ResponElimina...y yo que siempre creí que Berlanga era del Real Madrid?
¡Viva Berlanga!
http://www.ivoox.com/recordamos-a-luis-garcia-berlanga-audios-mp3_rf_425647_1.html
ResponEliminano dejéis de escuchar este momentazo. Hacia el minuto 9 sucede algo memorable. me lo hizo llegar un amigo de Gijón.
Por cierto, excelente artículo Vicent.
BT
Ahir, aprofitant que es podia comentar a Levante-EMV l'article de J.V. Alexaindre i el del nostre Vicent Chilet no vaig escriure el següent:
ResponElimina"Alexaindre, no tens raó, tota l'esperpentica situació actual del VCF és el millor homenatge que des del club li se pot fer a Berlanga. Com a mostra sols hi ha que revisar el juí pel tema "Valencia Experience" on ni García Berlanga ni Rafael Azcona hagueren signat un guió tan surrealista i berlanguià. Per a finalitzar esperem que açò no acabe amb un "Todos a la carcel".
Josep Bosch